Hace ya un año que nuestros hábitos y comportamientos de compra cambiaron dramáticamente; desde hacer el súper en línea, hasta cambiar el paseo al centro comercial por crear wishlists perfectamente seleccionadas.

En este artículo hablaremos de despertar consciencia de las compras que estamos haciendo en línea y la razón detrás de las mismas. Nuestras emociones juegan un papel importante a la hora de tomar las decisiones.

En momentos inciertos o situaciones de riesgo intentamos recuperar el sentimiento de estar en control de diferentes maneras. Una de ellas es consumiendo.

 

Emociones que sentimos antes de comprar / Lo que en realidad queremos sentir:

Duda / Certeza

Remordimiento / Paz

Nerviosismo  /  Tranquilidad

Desesperación / Plenitud

Al reconocer las emociones que experimentas mientras compras en línea, y tomarlas en cuenta sin sentirte culpable, puedes evitar que el impulso sabotee tus metas de vida.

Qué hacer cuando sientes el impulso de comprar en línea:

  • Revisa tus cuentas y tus deudas, no gastes más de lo que puedes pagar.
  • Revisa lo que ya tienes, por ejemplo: si quieres comprar ropa, ve a tu closet y limpia, acomoda, encuentra esa blusa que hace mucho no usas o esos jeans que aún no estrenas.
  • Revisa tu cuenta de ahorro, siéntete orgullosa de esa cantidad que has ahorrado.
  • Cierra la computadora y distráete haciendo cualquier otra cosa, saluda a tu perro, baila un poco, envía un mensaje a esa amiga que tienes mucho de no ver.
  • Piensa… ¿en verdad lo necesito? y repite esa pregunta 4 veces.
  • Lo agregas al carrito y si no es algo urgente, espera unos 5 días o hasta la quincena para ver si realmente lo necesitas.

Teniendo claridad hacia un objetivo es mucho más fácil de lo que crees hacer los sacrificios necesarios para llegar a él. Si reflexionamos y observamos cada compra nos vamos a dar cuenta que nuestros objetivos financieros son más alcanzables de lo que creemos.

Podrás darte cuenta de tu fuerza de voluntad y de que puedes invertir mejor el dinero si analizas los gastos innecesarios, estableciendo un proceso de reflexión antes de comprar y destinando el presupuesto que pensabas gastar a un ahorro para un objetivo mayor e importante.

 

Fuente: clarabanregio.com