Los expertos lo tienen claro: este año, primará, por encima de todo, la búsqueda del bienestar en casa.

Tonos neutros y cálidos

En 2021 vamos a apostar por interiores mucho más neutros; la tendencia en cuanto a tonalidades va a venir marcada por la necesidad de crear una sensación de bienestar en nuestras casas, con tonos tipo, beige, grises, negro y mucho blanco.

Adiós a lo ostentoso y ¡cuanto más natural, mejor!, paredes imperfectas, maderas crudas, colores naturales y atemporales.

 

Auge de la artesanía y los materiales naturales

Nos acercaremos a nosotros mismos y miraremos hacia adentro; lo importante es el bienestar y, por eso, necesitamos crear interiores acogedores y armónicos. Para conseguirlo, además de hacer uso de los tonos neutros, también nos aliaremos con la artesanía: Cada vez se revalorizará más lo hecho a mano, una tendencia que ya lleva un tiempo pegando fuerte.

De hecho, materiales como el barro están demostrando que siguen pudiendo reinventarse con diseños de vanguardia, la elección de materiales nobles y naturales también va a ser una tendencia que, sin duda, no va a pasar desapercibida. Mármoles, maderas, celosías en barro cocido, azulejos cerámicos artesanales que, además, poseen los tonos de los que hablábamos antes.

 

Textiles naturales: linos y lana

En el caso de los tejidos, seguirán reinando un año más los tejidos naturales, como los linos, el algodón y la ya casi omnipresente lana que encajan maravillosamente en estos nuevos espacios acogedores que se busca recrear, pues aportan personalidad, pero, sobre todo, calidez.

Bienestar olfativo

La tendencia general, que dicta que el bienestar ha de ser el objetivo principal, se percibe con el ojo, con el tacto y también con el olfato. Uno de los aspectos que nos puede ayudar a enfatizar el disfrute de la casa, que nos ayudará a estar más a gusto, es utilizar velas. Con ellas, además de aportarnos calidez, podemos configurar el aroma perfecto para cada momento, siendo el acompañante ideal para una velada o para relajarse después del trabajo. Aconsejamos aromas amaderados para conseguir un ambiente con más carácter y florales para aportar mayor frescura.

 

Minimalismo de líneas curvas

Pocos muebles pero seleccionados, formas suaves, texturas potentes, artesanía y una cuidada atención a los detalles. Las formas redondeadas y sinuosas también van a ser súper tendencia, aportan dinamismo y crean ambientes acogedores. Apostar por piezas vintage de los años 60 y 70 será todo un acierto.

Trazo y geometría

Estas dos tendencias gráficas han conquistado desde jarrones a lámparas, pasando por cojines y paredes, y no parece que su reinado vaya a acabarse próximamente. Un simple corte geométrico sorprende y aporta originalidad, consiguiendo modernizar los elementos clásicos como el enmarcado de una puerta.

 

Verde saludable

En 2021, las plantas, complemento innegociable de la decoración de un tiempo a esta parte, continuarán prevaleciendo en interiores. Especialmente, ahora que apreciamos más que nunca la limpieza y pureza del aire. Los espacios son diseñados para ser vividos; por ello, se llenarán de vida con plantas y flores que aporten frescura y vitalidad, que nos recuerdan sus múltiples beneficios para la salud, e incluso colocadas en espacios de trabajo, aumentan el rendimiento.

Ambientes polivalentes

Tras los meses de encierro que vivimos en 2020, no hay casa de nuevo diseño que no contemple la posibilidad de mutar sus usos cada vez que sea necesario.

Asimismo, empezaremos a ver normalizada la utilización de separadores de ambientes. En este ámbito, las cortinas se convertirán en una herramienta aún más común, el objetivo, además de multiplicar las posibilidades de uso, también es dotar de cierta privacidad a los habitantes de la casa, aunque sea de manera temporal, acotando el diseño de planta diáfano que ha prevalecido en los últimos años. Y, por supuesto, facilitar el montaje de un puesto de trabajo a distancia, un espacio que, en muchos casos, se mantendrá durante todo el año.

Fuente: revistaad.es